DOS MESES DE DURA LUCHA DE LOS MUNICIPALES DE NEUQUÉN
Los trabajadores municipales de Neuquén
llevan casi 70 días tomando el Palacio Municipal en reclamo de un aumento
de $250 al básico.
Entrevistamos al compañero Tito, militante de Democracia Obrera y trabajador
municipal
¿Cómo se mantuvo el conflicto hasta acá?
Tito: La base está
firme, aquí las peleas patronales nos son totalmente ajenas y no nos
bajamos de nuestro reclamo de $250 al básico ya. Esto quedó
demostrado en el endurecimiento de nuestra lucha. El jueves 28 de julio, ante
la falta de respuestas en la enésima mesa de negociación, nos
tomamos el centro de cómputos e impedimos por 2 días toda posibilidad
de recaudación al gobierno (que, impedido de funcionar por nuestra
toma, trasladó las ventanillas de cobro a los bancos). Ya antes habíamos
extendido la toma a otras dependencias, como Comercio, y 8 compañeras
se habían encadenado en el Concejo Deliberante. a pesar de la política
de la directiva del sindicato, encabezada por Luis Martínez, nada impide
que parte de la base exprese su bronca contra los concejales, tanto del MPN
como de otros partidos patronales, todos enemigos nuestros. Por ejemplo, los
hijos de estas compañeras que se encadenaron hicieron una marcha al
Concejo Deliberante, en la cual terminaron a los gritos apurando a los concejales
del MPN y haciéndolos responsables por la salud de sus madres. Incluso,
a otro concejal del bloque del PJ le patearon el auto y los vidrios y tuvo
que huir como rata por tirante. Este mismo sector es el que apoyó mi
moción en la asamblea de exigirle a la CGT que garantice el fondo de
huelga y gracias a eso esperamos poder cobrar los sueldos completos, ya que
vinieron con descuentos por los días caídos. En caso contrario,
tendrán que hacerse cargo Martínez y la Comisión Directiva.
Esta lucha ya sirvió para que los compañeros de Centenario,
que también venían parando, consigan un aumento remunerativo
y bonificable de 150 pesos (120 después de los descuentos), retroactivo
a enero; y que, además, les paguen los días caídos de
todo el mes de huelga. Nosotros, acá en Neuquén, seguimos en
la lucha.
¿Cuáles son las peleas más importantes que venís dando?
Tito: Antes que nada, vengo peleando junto a un sector de compañeros por que surja un verdadero Comité de Huelga para que sea la base, que es la que pone el cuero todos los días, la que decida y garantice cada medida. Ese comité habría tenido toda la autoridad para imponerle a la CGT un paro provincial por todas nuestras demandas, y por las del resto de los laburantes que sufren las mismas o peores condiciones que nosotros. Ese era el camino más corto y sencillo para conseguir el aumento que queremos. ¡Un solo día de paro de los trabajadores petroleros y del gas les tocaría los intereses más preciados a los monopolios petroleros que son los verdaderos gobernantes en esta zona! Y ahí se acaba la discusión. Por eso fue una carnereada la de Pereyra, Secretario General del Sindicato Petrolero y de la CGT provincial, que había llamado un paro el 29 de julio, por el mínimo imponible del impuesto a las ganancias, a través del cual les quitan una tajada de sus sueldos a los trabajadores petroleros, y dos días antes se sentó con Tomada y lo levanto a cambio de nada. Así nos arrebató una nueva oportunidad enorme que teníamos de hacer de ese paro una medida única, no sólo de los trabajadores del gas y el petróleo sino del resto de los laburantes que estamos dentro de la CGT, como nosotros, los de la UTA, la UOCRA, etc. Hoy estaríamos en muchas mejores condiciones para afrontar la negociación con el gorila de Quiroga y sus concejales.
¿Cuál ha sido la política de la CGT y de la CTA frente al conflicto?
Tito: Ha sido una
política traidora, de aislarnos tanto a nivel local como nacional,
que le ha permitido a la directiva del SITRAMUNE tratar de llevar nuestra
lucha hacia la confianza en las instituciones burguesas como el Concejo Deliberante,
y ahora nos pone a las puertas de una enorme derrota estratégica.
Los pleitos burgueses en la provincia han calado hondo en las filas de los
trabajadores por la acción consciente de la burocracia. Así,
la CTA kirchnerista, a la que se disciplinó vergonzosamente toda la
izquierda, le ha dado la espalda al conflicto municipal, a tal punto que las
marchas de miles de estatales, docentes y ceramistas que se concentraban frente
a la puerta de la municipalidad, eran llevadas por el centro hasta la gobernación
con sus dirigentes ignorando la toma del municipio ante sus narices. La consumación
de esta política divisionista fue el encuentro del 30 de junio convocado
por ATE, ATEN (CTA) y el SOECN en el club Pacífico, de espaldas al
conflicto municipal. Allí estuvo planteado conquistar un plan de lucha
unificado de todos los sectores de trabajadores y estudiantes en lucha hasta
imponer la Huelga General Provincial. La base abucheó a la burocracia
y hasta le impidió hablar a Fernández. Sin embargo, no salió
de allí ningún llamamiento a la base de los municipales, petroleros
ni obreros de la UOCRA a unificar todas nuestras fuerzas en una pelea superior.
Esa fue la política que impulsamos desde Democracia Obrera y que incluso
fui personalmente a plantear el 9 de julio al plenario de delegados del SOECN,
cuyos máximos dirigentes aún hoy no han aparecido a solidarizarse
con nuestra lucha. En saco roto cayó mi exigencia de que se pusieran
incondicionalmente al servicio de nuestra huelga y que había que romper
el cerco burocrático impuesto por la CGT y la CTA. Esto mismo planteamos
ante el Encuentro del 30, pero una vez más los dirigentes del PTS,
MST, PO y PCR, demostraron no estar dispuestos a sacar un solo dedo del pequeño
plato de la CTA.
La CGT tampoco se quedó atrás: a fines de julio estuvo el mismísimo
Moyano acá a unos kilómetros, en Cipolletti. Vino a lanzar la
campaña electoral patronal del PJ rionegrino, donde participa el burócrata
Solís y a anunciar la construcción de un hotel cinco estrellas
del Sindicato de Camioneros en Allen. Inclusive le dio una entrevista a Martínez.
Yo peleé para que fuéramos a esa entrevista tanto la Comisión
Directiva, el Cuerpo de delegados y Delegados por la asamblea y por que le
fuéramos a exigir un Paro Nacional y Regional en nuestro apoyo y que
venga al palacio municipal "tomado". Desgraciadamente, nada de esto
pudo llevarse a cabo porque la Comisión Directiva lo boicoteó
y la única respuesta que recibimos de Moyano fue que va a "hablar
con Kirchner y con Parrilli para que hagan de mediadores en nuestro conflicto".
Esta fue la máxima traición y condena al aislamiento que estamos
padeciendo. Si esto no es una carnereada ¿qué otro nombre tiene?
¿Cuál es, entonces, la necesidad del momento para que la lucha de ustedes pueda triunfar?
Tito: Necesitamos
darle un golpe superior al gorila intendente Quiroga, que apuesta a desgastarnos
y a quebrarnos por hambre. Pero no soy ingenuo; soy conciente, como muchos
compañeros, que nos han dejado en la estacada, tanto la CGT como la
CTA. Todos han puesto sus fichas en los negocios electorales como parte de
los partidos patronales oficialistas u opositores, y así nos dejaron
en pelotas. Yo he venido planteando en las asambleas que nos pongamos de acuerdo
y hagamos una marcha masiva a la CGT y a la CTA, para imponerles que rompan
su política carnera o, de lo contrario, los vamos a revolear por las
ventanas de sus cómodos despachos. A esta altura no nos queda otra...
Fijate vos qué osadía del intendente, que metió por la
ventana en la negociación la integración de la Junta de Disciplina,
Junta de Reclamos y Junta de Calificaciones, pago de licencias gremiales y
modalidad de concurrencia a las asambleas. A través de este organismo,
intentará liquidar todas nuestras conquistas. Allí se va a discutir
(e imponer, porque los trabajadores seremos una minoría absoluta),
por ejemplo, la "polifuncionalidad" de todos los laburantes. O sea
que de esta forma el gobierno obtendría todo lo que intentó
mil y una veces imponernos, y que evitamos solamente con la lucha. Nada menos
que ésta es la prenda de cambio para darnos el aumento salarial.
En honor a la verdad, yo tengo la obligación de decirles a todos mis
compañeros que esta osadía de Quiroga es posible gracias a la
política entreguista de Martínez y compañía que
ahora nos está imponiendo esta política pro patronal aprovechando
el terrible aislamiento en que nos encontramos y la desesperación de
la mayoría de los compañeros. Estoy convencido que esa Junta
Disciplinaria va a ser la sepulturera de nuestro estatuto, si es que consiguen
imponerla. Llamo a todos mis compañeros a levantar la guardia y a organizarnos
políticamente juntos para derrotar a todos los que quieran entregar
las conquistas (¡que ni siquiera Videla pudo arrancarle a nuestros viejos!)
y a exigirle a todas las organizaciones obreras combativas del país
un pronunciamiento de apoyo a nuestra lucha y por la libertad de Cristian
Ruiz de Caleta Olivia y todos los presos por luchar. Los llamo a que apoyemos
a los compañeros del Garrahan que están en una pelea dura como
la nuestra, y a que nos coordinemos con ellos, porque si ganan ellos, que
están peleando por 1800 de básico, ganamos todos. o